Un nene de 8 años murió al tocar un cerco eléctrico en Brandsen. Sus padres aseguraron que se trató de un accidente luego de dejar encendido por olvido el dispositivo que usaban para que no se les escapen los perros. Lo más llamativo es que el cerco estaba conectado a 220 kv.
Los padres aseguraron que se trató de un accidente, debido a que se olvidaron de desconectar el dispositivo eléctrico que usan para que no se les escapen los perros, aunque con ese voltaje los animales también perderían la vida.
La tragedia tuvo lugar en una casa rural ubicada sobre la calle Wichi. De acuerdo con la versión oficial, el menor ingresó de urgencia cerca de las 15 horas al hospital municipal Francisco Caram, donde fue llevado por sus padres.
El menor estaba en estado inconsciente y con importantes quemaduras en su cuerpo. Pese a los intentos de los médicos por salvarle la vida, la víctima falleció.
La mamá del niño contó que su hijo se encontraba jugando y que por accidente tocó el boyero del cerco eléctrico.
Su padre agregó que el dispositivo estaba conectado desde la noche anterior y que se “habían olvidado de apagarlo”, ya que lo dejan encendido para que “los perros no se escapen”. (Detrasdelanoticia.com.ar)