Solveig David Vanini Marchi (34), el médico brasileño del Hospital Piñero que se encontraba desaparecido, fue encontrado muerto en un hotel del barrio porteño de Monserrat.
Había sido visto por última vez este martes a las 21, cuando dejó su trabajo en la guardia en ese centro médico del barrio de Flores. Dijo que iba a un cajero automático cercano. Desde entonces no había noticias sobre su paradero.
Finalmente, este jueves la Policía de la Ciudad cruzó información de antenas de telefonía celular, tarjetas bancarias y cámaras de seguridad, lo que permitió encontrarlo en un hotel ubicado en la calle Adolfo Alsina al 800, a unos 10 kilómetros del Piñero.
El conserje del lugar indicó la habitación en la que se estaba alojando y al ingresar los oficiales lo encontraron sin vida. El SAME envió dos ambulancias y motos médicas y el personal constató en el lugar el fallecimiento. En primera instancia, se investiga un suicidio.
La denuncia sobre su desaparición había sido realizada por la jefa de guardia del hospital ante la Comisaría Vecinal 7 B de la Policía de la Ciudad.
«Vanini Marchi se hallaban de guardia en ese centro asistencial del barrio de Flores, y se retiró anunciando que iba a un cajero automático, pero no volvió», habían relatado fuentes oficiales.
Según el testimonio de sus compañeros, el médico clínico, que hacía suplencias en el hospital, dejó sus pertenencias en el centro médico y sólo salió con su tarjeta de débito y el celular.
Ante su ausencia, se había lanzado una campaña de búsqueda a través de las redes sociales, en las que lo describían como «de tez blanca con un tatuaje como banda de capitán de equipo de fútbol en uno de sus brazos».
(Clarín)
