Bajo la administración de Javier Milei, las Fuerzas Armadas argentinas se encuentra en una fase de modernización tecnológica para alcanzar y mantener estándares internacionales, luego de décadas de abandono por parte de los gobiernos anteriores, especialmente los kirchneristas. En este marco, uno de los proyectos más destacados es el reemplazo de los llamados «caballos de acero«: el Tanque Argentino Mediano (TAM).
Este viernes 20 de diciembre, el jefe del Ejército entregó a su fuerza operativa diez tanques modernizados, correspondientes a la versión TAM 2C-A2. Además, se entregaron dos prototipos de los modelos TAM 2C y TAM 2C IP.
«Desde el momento en que las nuevas tripulaciones del Regimiento de Caballería de Tanques 8 embarquen en los tanques, el salto cualitativo alcanzado pondrá en manos de nuestros jóvenes un sistema de armas moderno y actual, que los exigirá en su capacitación para el empleo profesional del vehículo en toda su dimensión«, destacó el gobierno en un comunicado.
«Los oficiales, suboficiales y soldados que integrarán las dotaciones de los nuevos TAM 2C-A2 han debido realizar cursos y jornadas de perfeccionamiento para poder operar los distintos sistemas«, explicaron.
El proceso de modernización llevó a cabo en los talleres de la Dirección General de Investigación y Desarrollo y de la Dirección de Arsenales en el Cuartel de Boulogne.
El diseño original del Tanque Argentino Mediano, que data de finales de la década de 1970, representó un avance significativo acorde con los sistemas de armas utilizados por las principales fuerzas militares del mundo.
Sin embargo, con el paso del tiempo, surgió la necesidad de modernizar este vehículo para alinearlo con los avances tecnológicos y las nuevas doctrinas de guerra. En respuesta a este desafío, la Dirección General de Investigación y Desarrollo (DIGID) formó un equipo de trabajo para optimizar los aspectos más críticos del TAM: la tecnología disponible para los operadores en el tiro, la seguridad y la visión al conducir el tanque.
El objetivo fue equiparlo para el combate moderno «todo tiempo«, es decir, para operar tanto de día como de noche y bajo condiciones meteorológicas adversas.
Además, se llevaron a cabo diversas evaluaciones técnicas, que incluyeron pruebas del tanque en diferentes escenarios de combate. Estas pruebas pusieron a prueba el arma contra blancos ubicados a diversas distancias y bajo diversas condiciones, y la principal conclusión fue la necesidad de modernizar ciertos aspectos del tanque.
Al momento de realizar las implementaciones, se eligió la opción más conveniente para la Fuerza, que no solo ofrecía una solución integral, sino también una vasta experiencia en sistemas empleados en conflictos actuales y la capacidad de realizar los trabajos dentro de Argentina.
Según explicaron, el TAM 2C-A2 le otorgará a la Argentina capacidades de combate avanzadas, ya que permite operar en una gran variedad de entornos y condiciones, incluyendo alta concentración de humo, explosiones y niebla.
Esta versión también mejora la precisión, aumenta el alcance efectivo, reduce la propagación del fuego y ofrece la capacidad de rastrear y localizar objetivos de manera automática.
