La compañía agropecuaria Vicentin, que arrastra hace seis años una delicada situación financiera y judicial, anunció que no podrá pagar los sueldos de sus 3000 empleados luego de que la Corte Suprema de Justicia santafesina rechazara homologar el concurso de acreedores, y el gremio de aceiteros se puso en alerta ante el peligro de que los trabajadores sean despedidos.
El máximo tribunal de la provincia de Santa Fe hizo lugar a un recurso de inconstitucionalidad presentado por uno de los acreedores de Vicentin, Commodities SA, y la empresa advirtió que en esta situación no podrá afrontar el pago de los salarios.
El Sindicato de Obreros y Empleados Aceiteros del Departamento de San Lorenzo y la Federación de Trabajadores del Complejo Industrial Oleaginoso de la Argentina no tardaron en reaccionar ante la noticia, advirtiendo que no permitirán “la pérdida de un solo puesto de trabajo” ni que se pague “un solo peso menos” a los empleados.
“No seremos simples testigos de la liquidación de la empresa Vicentín, cuyos principales responsables son sus propietarios, empresarios que la llevaron a esta situación de cuasi quiebra”, avisaron los sindicatos del sector.
Vicentin entró en default en 2019 y al año siguiente solicitó el concurso preventivo de acreedores. Desde entonces se encuentra en una situación financiera y judicial complicada. El caso volvió a quedar en el candelero a fines del año pasado, cuando el Grupo Los Grobo, uno de los más importantes del sector agropecuario, también entró en cesación de pagos.
(La Tecla)
