Una avioneta que viajaba desde Coronel Suárez hacia Neuquén tuvo que descender de urgencia el jueves por la tarde tras sufrir una falla en el motor. El aterrizaje se produjo en una picada contrafuego a unos 60 kilómetros de la localidad pampeana de Puelches, y sus cuatro ocupantes resultaron milagrosamente sin lesiones.
El incidente ocurrió alrededor de las 16:00 horas, cuando la aeronave sufrió un desperfecto mecánico que provocó la detención total del motor en pleno vuelo. Los ocupantes lograron mantener el control durante la caída, y planearon hasta aterrizar sobre una franja despejada de vegetación, en medio del campo La Unión, próximo a la Ruta 13 y a unos 25 kilómetros de Lihuel Calel.
Recién pasadas las 23:30, un grupo de vecinos que andaban cazando en la zona encontró la aeronave en la oscuridad, con los tripulantes aún a bordo. Claudio Antiman, uno de los cazadores, relató a La Arena que fue una “gran sorpresa” toparse con la avioneta en medio de la nada: “Los chicos estaban muy nerviosos, una de las chicas estaba en shock y se había descompuesto por el susto”.
“Venían para estrellarse y en un momento el avión planeó. Tuvieron la suerte de encontrar esa picada y aterrizar”, señaló Antiman. La aeronave permaneció en el lugar hasta el día siguiente, cuando un mecánico desde Bahía Blanca se acercó para evaluar los daños.
El rescate improvisado también tuvo complicaciones: la camioneta que fue a socorrer a los ocupantes sufrió la rotura de un neumático, y los cazadores debieron colaborar en la reparación: “No tenían auxilio ni herramientas, así que también hicimos de gomeros”, contó Antiman entre risas.
Afortunadamente, no hubo heridos y el avión no sufrió daños de consideración. Los tripulantes fueron luego trasladados hacia Coronel Suárez para recibir atención, especialmente la joven que había resultado más afectada emocionalmente. (Diario de Rivera, con información de La Arena)