El Grupo Simpa, uno de los principales jugadores del mercado de motos en Argentina, anunció el cierre de su planta en Campana y el despido de 50 trabajadores. La compañía justificó la medida como parte de un proceso de reestructuración y centralización de la producción en su planta de Pilar, provincia de Buenos Aires.
“Centralizamos nuestra operación productiva en la planta ubicada en el partido de Pilar, discontinuando la actividad de Campana. De esta forma, aseguramos la continuidad de los procesos productivos, la competitividad y la atención a los clientes para todas las marcas que representamos”, comunicó oficialmente la empresa.
La firma explicó que la decisión se debió a un cambio en la estrategia global de uno de sus socios internacionales, que resolvió que determinados modelos solo se fabriquen en plantas de origen y no en filiales del exterior. Esta modificación redujo el ritmo de producción y dejó sin actividad a la estructura de Campana, que se dedicaba al ensamblaje de motos KTM, Husqvarna y CFMoto con kits importados de India, China y Europa. La planta tenía capacidad para producir 200 unidades diarias, con apenas un 5% de componentes nacionales.
No obstante, la conducción de la Unión Obrera Metalúrgica (UOM) denunció que la decisión se adoptó “sin previo aviso” y sin aplicar los procedimientos legales de prevención de crisis, lo que generó preocupación en el sector.
El Grupo Simpa representa a más de 15 marcas internacionales, entre ellas KTM, Royal Enfield, Harley-Davidson, Piaggio, Vespa, Moto Guzzi, MV Agusta, Can-Am y Husqvarna.
El cierre de la planta se da en un contexto de retroceso del empleo privado registrado, que según la Encuesta de Indicadores Laborales (EIL) del Ministerio de Capital Humano mostró en julio una caída del 0,2% intermensual e interanual en empresas de más de 10 trabajadores. La contracción se verificó tanto en el interior del país como en el Gran Buenos Aires.