Las luces empiezan a invadir las calles de cada ciudad. Los colores navideños tiñen los espacios públicos; la Navidad se anuncia y el ánimo festivo se apodera de todo.
Como desde hace algunos años, ya en los primeros días de diciembre, las calles de Rivera, las plazas, anuncian la llegada de la Navidad y se transforman en escenario de celebración gracias a la labor de Mabel Brokman, una ciudadana que con un trabajo silencioso aporta su granito de arena armando las distintas estructuras que visten a la localidad en el marco de las fiestas.
Luces y colores adornan los espacios a lo largo de la Avenida San Martín, esperando la llegada de esta Navidad que, si bien tiene su origen en la tradición cristiana, logró popularizarse trascendiendo las barreras de la religión.
Con creatividad, de la mano de un mensaje de conciencia ambiental, desde hace años la riverense logra embellecer el espacio público utilizando el reciclado de botellas plásticas. Árbolitos, trineos, renos y velas, entre otros tantos objetos, son los que se pueden ver en las calles de la localidad. Un trabajo artesanal que Mabel realiza durante parte del año para vestir a Rivera con un espíritu navideño inigualable.