El incendio que se inició en el lago Martin por la caída de un rayo, y que luego se propagó hacia el lago Steffen, lleva 20 días y ya consumió unas 3.000 hectáreas de bosque nativo. Se prevé una semana con condiciones climáticas desfavorables para combatir las llamas, por lo que las autoridades decidieron extender hasta el 1° de enero el cierre total del ingreso al valle del río Manso inferior.
Pobladores de la zona donde el fuego se mantiene activo reclaman el envío de aviones hidrantes y maquinaria, e iniciaron trabajos de cortafuegos al pie de las montañas.
«Los pobladores estamos dispuestos a exponer nuestras vidas para defender los bosques y nuestro hogares. Nos encontramos con miedo, sobre todo, dados los antecedentes en la comarca con los incendios y los hacemos directamente responsables de las consecuencias”, señalaron en un comunicado, en alusión a «todas las autoridades competentes».
Vecinos del Manso, Río Villegas y Bariloche comenzaron a juntar donaciones, especialmente para las personas que combaten el fuego. Desde el Gobierno de Río Negro, sin embargo, pidieron no realizar este tipo de acciones.
«Las autoridades solicitan que, por estrictas razones de seguridad, no se acerquen de forma espontánea a combatir los incendios voluntarios ni agrupaciones», advirtieron desde el Servicio Nacional de Manejo del Fuego (SNMF), según consigna La Nación.
Las autoridades remarcaron, desde un primer momento, que la zona del incendio es de difícil acceso. Existe sólo un camino de ingreso y egreso, con una pendiente de complejidad media de 400 metros en un recorrido de siete kilómetros. “Ese es el único camino de ingreso. Por lo tanto, es también la única vía de evacuación para pobladores y combatientes. Por esta razón, solo se despliegan recursos factibles de evacuar en caso de un avance descontrolado del incendio hacia la zona de trabajo”, dijeron ayer, publicó el mismo medio.
Para colmo, las condiciones meteorológicas no ayudan y no se prevén mejoras: para los próximos días, se espera un frente frío y un descenso de la temperatura, lo que provocaría un aumento de los vientos.
Las condiciones meteorológicas tampoco ayudan. Ayer hubo vientos intensos del sector oeste con ráfagas desde el mediodía. Y hoy hubo mayor intensidad y ráfagas a partir de la tarde de hasta 50 km/h.
“Se prevé una semana desfavorable, con la presencia de un frente frío que ingresa predominante del sector oeste. El miércoles se pronostica mayor actividad del viento y el jueves posibilidad de escasas precipitaciones”, indicaron desde el SNMF.
En la zona trabajan 86 brigadistas nacionales, un avión hidrante anfibio y dos helicópteros con helibalde.
Los incendios también se extienden a otras dos provincias. En Neuquén, un foco se encuentra activo en el Lote 39 de la localidad de Quillén, a unos 40 kilómetros de Aluminé; y hay incendios contenidos en Pehuenco-Rucachoroi y Chapelco.
En Quillén, el fuego ya consumió más de 4.000 hectáreas.
En Chubut, en tanto, hay incendios controlados en Tehuelches, así como fuegos contenidos en Río Senguer y Futaleufú. Y entre Lago Puelo y El Hoyo, el incendio que se inició en el cerro Currumahuida continúa activo. Allí, ya se consumieron unas 100 hectáreas de bosque.