«Miguel Riglos ya no es el pueblo tranquilo que fue hasta hace algunos años. Nos ha invadido la droga, con sus efectos negativos en los jóvenes» comentó un vecino de esa localidad al diario La Arena, atribulado por algunos episodios ocurridos durante los últimos fines de semana.
El domingo por la madrugada, esa comunidad despertó conmocionada por un incidente que milagrosamente no resultó una tragedia, luego de que cuatro adolescentes robaran una camioneta y la condujeran temerariamente hasta estrellarla y dejarla completamente destruida. «Milagrosamente no se mataron. El chico que conducía quedó atrapado en su interior y los bomberos tardaron más de dos horas para liberarlo». En su descontrolado raid por las calles, la camioneta «chocó contra varios vehículos estacionados, algunas palmeras y otros árboles», antes de volcar y terminar con cuantiosos daños materiales.
Pero no fue un incidente aislado, «es algo que se repite los fines de semana». Durante la madrugada del sábado anterior, «un panadero dejó estacionado su Toyota Corolla frente a su comercio, con las llaves colocadas. Mientras horneaba el pan, un joven sustrajo su vehículo y dio unas vueltas por el pueblo hasta estrellarlo contra un terraplén». Si bien tampoco hubo que lamentar lesiones graves, el incidente terminó «con el automóvil completamente destruido», comentó el vecino al mencionado diario pampeano.