Luego de poco más de cuatro años después de la conquista de Francia en Rusia 2018, la competencia más importante de la FIFA comenzó con el debut absoluto de un país anfitrión, algo que no pasaba desde Italia 1934.
Los jugadores de Qatar ingresaron al campo de juego apenas levantaron la lona que se dispuso en la ceremonia inaugural, para hacer la entrada en calor previa al primer partido del Mundial. El plantel de Ecuador llegó un par de minutos después y comenzaron a hacer haciendo los ejercicios competitivos junto a la cabecera donde se encuentran sus hinchas.
Hubo un momento de la ceremonia inaugural donde aparecieron inflables que representaron las mascotas de los Mundiales que precedieron a Qatar 2022 y entre ellas se pudo ver al Gauchito de Argentina 1978, con su tradicional sombrero, su camiseta albiceleste y su pañuelo amarillo.
La cuenta regresiva marcó el ingreso del host, el actor de Hollywood Morgan Freeman. Con ritmos folclóricos qataríes, trajes típicos y hasta camellos sobre la lona dispuesta sobre el césped del campo de juego, los qataríes armaron un espectáculo que combina tradición, tecnología y buen gusto.
El “ejército” de esapadas láser les dio la bienvenida a las banderas de los 32 países participantes. Arrancó con el “vamos vamos Argentina” del Mundial 78 y la siguieron el resto de los himnos mundialistas, en un variopinto popurrí de canciones.
La segunda parte del show viró a una coreografía internacional. Al ritmo del Alé Alé de Ricky Martin, himno de Francia 98, siguió con el Waka Waka de Shakira de Sudáfrica 2010, hasta llegar al Hayya Hayya de Qatar 2022.
Las mascotas de todos los mundiales dominaron la escena mientras de fondo se proyectaban imágenes de glorias de los mundiales, con Diego Maradona al frente. La siguiente ovación llegó cuando se desplegó un gigante La’ebb, la mascota de este Mundial, lo que dio paso al show musical de Jung Kook, el cantante surcoreano de BTS.
Ya para el final de la ceremonia, llegó el turno de las palabras del emir Tamin bin Hamad Al Thani, que fue observado a metros por el presidente de la FIFA, Gianni Infantino. ( La Nación)