El presidente Javier Milei cerró su gira por Israel, el Vaticano e Italia con una entrevista exclusiva a un canal de noticias en donde habló sobre su encuentro con el Papa Francisco en donde reconoce públicamente algo que ya había realizado durante la campaña presidencial en donde había pedido disculpas por haber llamado al Sumo Pontífice el “representante del maligno en la tierra”. Previamente el Secretario de Culto, Francisco Sánchez, detalló que el diálogo entre el jefe de Estado y el Sumo Pontífice fue “muy cordial, con mucha simpatía y amistad”.
El titular del Estado argentino le dio una entrevista al canal privado TV Retequattro, un canal del conglomerado Mediaset, propiedad de la familia del fallecido Silvio Berlusconi, en el programa de Nicola Porro e hizo referencia a que “reconsideró” su postura respecto del Papa Francisco y que a partir de ese momento la relación se reencausó.
Pero en la entrevista que se verá esta noche, a las 21:30- en Italia -alrededor de las 17:30 hora argentina- Mieli fue un poco más allá y no solo reconoció que cambió de opinión respecto del jefe de la iglesia católica sino que, además, señaló que Francisco es la persona “más importante” de todo la Argentina.
En otro tramo de la entrevista Milei hizo referencia a que es católico pero que practica “algo de judaismo”, un detalle no menor teniendo en cuenta que en otro momento se refirió a Francisco como el “líder de los católicos del mundo”.
Pero el Presidente de la Argentina no solo se refirió a su encuentro con el Papa Francisco sino que en otro tramo de la entrevista hizo referencia a su posicionamiento ideológico y a una de las ideas rectoras que llevó hace poco tiempo atrás al Foro de Davos: el Estado es una asociación criminal.
“Siento un profundo desprecio por el Estado. Yo creo que el Estado es una asociación criminal”, dice un Milei que sorprende al conductor quien le vuelve a preguntar sobre esa misma idea. “Claro, es decir el Estado es una asociación criminal porque un conjunto de políticos se ponen de acuerdo y utilizan el monopolio de la violencia para robarle al sector privado”.
Con información de Infobae