El papa Francisco recibió en El Vaticano a la titular de Abuelas de Plaza de Mayo, Estela de Carlotto, quien estaba en Roma tras recibir una distinción.
El encuentro entre el santo padre y la presidenta de Abuelas se dio un día después de que Carlotto recibiera un doctorado en la Universidad de Estudios Roma Tre.
“Lo veo como un hermano menor (al Papa) porque creo que es una persona realmente única”, sostuvo la titular de la entidad de derechos humanos en declaraciones a la prensa.
Tras recibir el doctorado, Carlotto, de 93 años, también remarcó el trabajo “por la paz en el mundo” que realiza el Papa y lo destacó como “una persona ejemplar”.
La Universidad Roma Tre le otorgó a la dirigente del movimiento de Derechos Humanos el doctorado cum laude en Lengua y Literatura por la utilización que las Abuelas de Plaza de Mayo hicieron del arte para amplificar la búsqueda de los nietos apropiados y desaparecidos durante la última dictadura cívico militar en Argentina entre 1976 y 1983.
Carlotto reconoció que cuando Jorge Bergoglio fue nombrado como nuevo Sumo Pontífice el 13 de marzo de 2013 ella había tenido una reacción negativa porque tenía una percepción equivocada de su figura.
«Está haciendo lo que debe hacer un papa, que es pedir por la paz para el mundo”, expresó la titular de Abuelas sobre la tarea que está desarrollando Francisco en la actualidad.
En su premiación en Roma, la dirigente de Derechos Humanos no olvidó el actual contexto que vive la Argentina y advirtió que “algunas de las políticas de Memoria, Verdad y Justicia están en peligro”.
Vinculó esta situación a “los discursos de odio y negacionismo, en muchos casos pronunciados por integrantes del gobierno de turno”.
Para Carlotto, el Gobierno de Javier Milei y Victoria Villarruel “intenta deslegitimar nuestra lucha y la de todos los argentinos, por la memoria y la democracia”.
“El único camino es la lucha colectiva con amor y perseverancia”, afirmó, y aseguró que Abuelas continuará en la búsqueda de ”unas 300 personas que viven con su identidad vulnerada”.
A raíz de la lucha histórica y el compromiso inclaudicable, la organización consiguió identificar hasta el momento a 137 nietos de desaparecidos, incluido el propio nieto de Carlotto, Remo Carlotto.
También destacó que en parte por ese esfuerzo que dieron junto a todo el movimiento de Derechos Humanos, en Argentina “se anularon las leyes de obediencia debida y punto final, comenzaron los juicios a los genocidas y sus cómplices, y cada lugar de encierro, de tortura y de muerte se convirtió en un espacio de memoria».
(NA)