
En una sesión con fuerte presencia de críticas opositoras, el Concejo Deliberante de Adolfo Alsina desaprobó por mayoría la Rendición de Cuentas correspondiente al ejercicio 2024. La votación resultó en 7 votos negativos –provenientes de los bloques de Unión por la Patria, La Libertad Avanza y Evolución– y 4 votos afirmativos del oficialismo. El concejal Omar “Fano” López (Juntos) se ausentó de la sesión.
Críticas desde Unión por la Patria: «Dejan campo arrasado»
El primero en tomar la palabra fue el concejal Leandro Varela, quien cuestionó graves discrepancias en los informes financieros.
“Cuando observamos las cuentas extra presupuestarias, notamos una divergencia significativa. En la situación económica financiera, se indica que lo percibido fue de $3.267 millones y lo pagado de $3.056 millones, lo que arroja un saldo favorable de $210 millones. Pero en la ejecución extra presupuestaria de recursos y gastos, lo percibido baja a $688 millones y lo pagado sube a $752 millones, lo que deja un déficit de $2.500 millones”, advirtió.
Varela también remarcó la falta de detalle en las cuentas bancarias:
“No se especifica cuáles corresponden al ejercicio, cuáles son afectadas, ni cuáles son presupuestarias. Esto debería estar claramente identificado para facilitar el análisis en el sistema RAFAM”, expresó.
Además, subrayó que el estado de ejecución del presupuesto presenta una deuda flotante de $2.480 millones, es decir, un déficit del 15,35% del presupuesto municipal.
“Estos recursos se gastaron sin la aprobación del Concejo. Eso, por sí solo, amerita el rechazo. No podemos convalidar una rendición con déficit no autorizado. Gastaron más de $2.500 millones de lo que nosotros habíamos aprobado. Dejan campo arrasado. No podemos ser cómplices de esto”, sostuvo.
A su turno, la concejal Carmen Calderón reforzó la crítica, especialmente en cuanto a la ejecución de servicios públicos esenciales:
“A pesar de la difícil situación provincial, la Provincia nunca dejó de asistir al municipio. Sin embargo, observamos partidas manipuladas y muchas de ellas no fueron utilizadas para los fines previstos.
Por alumbrado, barrido y limpieza se recaudaron $256 millones. ¿Los vecinos vieron ese servicio reflejado?
Por conservación de la red vial, se recaudaron $1.025 millones, pero los caminos están detonados.
Por salud, se percibieron $51 millones, y los vecinos no ven mejoras en los servicios. Todos estos recursos son de libre disponibilidad, lo cual aumenta la discrecionalidad del Ejecutivo y disminuye el control”, remarcó.
El concejal Juan Carlos Bento fue aún más crítico al exponer la subejecución sistemática de partidas clave:
“El plan de integración universitaria tenía $42 millones y se ejecutaron $19 millones (45%).
El plan de asistencia alimentaria tuvo $11,4 millones y se ejecutaron cero pesos.
En torneos juveniles, se asignaron $52 millones, se usaron $38 millones, pero solo $232 mil fueron del recurso afectado, o sea, el 5%.
Esto no es casual, se repite desde 2023. La interpretación es clara: se subejecutan partidas para acumular recursos y luego se usan discrecionalmente.
El Ejecutivo brinda servicios deficientes, tardíos y sólo paga sueldos. Esta rendición refleja el desorden de la gestión”, sentenció.
También desde Unión por la Patria, la concejal Mary Stevssel enfatizó la falta de cumplimiento del presupuesto aprobado por el propio Concejo:
“En la aprobación del presupuesto se definieron partidas prioritarias para áreas sensibles. Sin embargo, muchas quedaron sin ejecución. Hay falta de informes, ausencia de transparencia y una limitada participación ciudadana.
No hay rendición real de cuentas ni coherencia entre lo prometido y lo ejecutado. Es momento de que asuman responsabilidades políticas y administrativas por lo que no hicieron”, reclamó.
La Libertad Avanza: “No hay ganas de mejorar”
El concejal David Rodas (La Libertad Avanza) justificó su rechazo con una crítica al desgaste de la gestión:
“El primer año acompañamos al Ejecutivo. No quisimos poner palos en la rueda. Pero hoy no vemos mejoras, o no las quieren hacer, o no los dejan.
El intendente tiene la última palabra y los vecinos lo juzgarán.
Hay problemas graves en obras públicas, salud y seguridad. No hay voluntad ni gestión. Tomarle el pelo a la gente con promesas incumplidas es inaceptable”, aseguró.
Rodas también cuestionó la supuesta asistencia provincial:
“La concejal Calderón dice que la provincia ayuda. Pero bajaron $300 millones en coparticipación, las rutas están destruidas y no llega ayuda para el Hospital San Martín ni para la educación. Hay una indignación selectiva que depende del color político”, finalizó.
Evolución: “La rendición no refleja la realidad”
El concejal Facundo Montenegro, del bloque Evolución, fue contundente:
“Muchas partidas no se ejecutaron como correspondía. En la presentación del presupuesto decían que cada decisión se tomaba ‘para garantizar el desarrollo, la equidad y la inclusión’. Esa frase parece copiada de otro municipio, no representa lo que ocurre en Adolfo Alsina.
Hablan de ampliar la red cloacal, pero en Carhué está colapsada.
Dicen que entregaron 8 viviendas en San Miguel después de 12 años.
Mencionan modernización edilicia y la municipalidad se cae a pedazos. La Delegación de Maza está igual.
En cada área hay contradicciones flagrantes con la memoria del Ejecutivo.
Para colmo, se aprobaron por decreto 536 ampliaciones y compensaciones sin pasar por este Concejo, violando la normativa vigente”, denunció.
Los argumentos de la oposición coincidieron en señalar una gestión desordenada, opaca y alejada de las necesidades reales del distrito.
Con acusaciones de déficit millonario no autorizado, manipulación de partidas clave y ausencia de control, la rendición fue rechazada.

















