La empresa automotriz Toyota les comunicó este martes a sus proveedores que, por la falta de cubiertas, a partir de mañana frenará la producción de su planta de Zárate. Se sumó así a Ford, que ayer a la mañana fue la primera en parar la actividad. El resto de las terminales siguen trabajando pero con un stock limitado, que no va más allá de los 10 días y las mantienen pendientes de la situación.
El freno en las plantas deriva del conflicto salarial entre el Sindicato Único de Trabajadores del Neumático Argentino (Sutna) y las tres empresas fabricantes de neumáticos del país –Bridgestone, Pirelli y Fate–, que ayer mantuvieron una reunión de seis horas en el Ministerio de Trabajo pero no llegaron a un acuerdo.
Toyota es la terminal argentina que más produce y exporta desde 2016. En 2021, además, fue la que más vendió en el mercado interno, posición que mantiene este año. En la planta de Zárate produce las camionetas Hilux y SW4, que usan cubiertas Bridgestone y se exportan a 22 países de la región. En el mercado local, incluso antes de la escalada de este conflicto, ya había mucha demora en las entregas.
Según el último Panorama Productivo de la Secretaría de Industria, la actividad de neumáticos cayó 16,7% interanual en julio por el conflicto gremial latente desde mayo. En Toyota desde hace alrededor de un mes trabajan con ruedas “muleta”: para no frenar la línea de producción utilizan cualquier neumático disponible y luego lo reemplazan con la que corresponde. Sin embargo, en un contexto recrudecido de escasez, tampoco esta estrategia puede sostenerse .
Por el momento, Toyota no suspenderá trabajadores. Se seguirán pagando los salarios normalmente, pero las horas que no se trabajen quedarán como “crédito”. El sistema de banco de horas establecido en el convenio colectivo le permite a la empresa recuperar en algún momento las horas perdidas. De todos modos, lo que se frena es la producción, pero continuarán las tareas habituales de mantenimiento y capacitación.
En Ford tampoco se suspendieron turnos por el momento ni se relevaron trabajadores; los empleados deben ir a hacer mantenimiento o cumplir con otras tareas. La empresa se encuentra ejecutando un plan de inversiones de US$580 millones para la transformación de su planta de General Pacheco, lo que implica cambios en los procesos y capacitaciones que podrían adelantarse mientras el conflicto con los neumáticos tenga parada la actividad, siempre que la duración sea acotada.
En Stellantis, empresa que comercializa en la Argentina Fiat, Jeep, Ram, Peugeot y Citroen tienen stock para alrededor de 10 días y siguen produciendo a ritmo habitual. Fabrican en el país, por ejemplo, el Fiat Cronos, el Peugeot 208 y la Citroen Berlingo, para los que usan neumáticos Pirelli. Sin embargo, si el conflicto no se soluciona en el plazo de siete días se evalúa la suspensión de turnos, algo que ya se está conversando con los dos gremios que representan a los trabajadores de sus dos plantas: Smata en Córdoba y la UOM en El Palomar.
En Renault señalaron que “esta semana la producción está garantizada”, del mismo modo que en Volkswagen, pero que siguen “muy de cerca la evolución de la situación”.
Esta mañana la portavoz de la Presidencia, Gabriela Cerruti, hizo un llamado a la “sensatez de todos los sectores” para resolver el conflicto.“Queremos que los trabajadores tengan todo el aumento que puedan obtener y sus derechos, pero pedimos un espacio de sensatez para poder llevar adelante las medidas (de fuerza) sin que afecte a las empresas y a la vida cotidiana de todos”, dijo.
El sector automotriz –que es uno de los que contribuyen a la recaudación de divisas vía exportaciones– viene impulsando la recuperación industrial, con un crecimiento por encima del 20% interanual. Este martes el secretario de Industria, José Ignacio de Mendiguren, recibirá a representantes del sector automotriz y mañana a las 14 se retomará en el Ministerio de Trabajo la reunión entre el Sutna y los representantes de las empresas fabricantes de neumáticos.
