El gobierno de Javier Milei avanzó en la definición de un nuevo esquema de subsidios para las tarifas de luz y el gas que espera aplicar a partir de mayo. Este jueves, la Secretaría de Energía presentó, en audiencia pública, el diseño de la nueva Canasta Básica Energética (CBE).
Según se informó durante la presentación, el principal criterio de inclusión y exclusión a partir de los cuales un hogar podrá recibir subsidios al gas y la electricidad pasará, de implementarse esta propuesta, por el porcentaje de representación del costo total del servicio sobre los ingresos totales, que no deberá ser superior al 10%, tomando en consideración también a otros parámetros como las zonas bioambiental del país.
En este sentido, se informó que el costo de la CBE será de entre $30.000 y $40.000 mensuales promedio, número que irá variando mes a mes, se aclaró en la jornada. En tanto, el tope de ingresos mensuales de los hogares a partir del cual se quitarán los subsidios sería de $475.000 en promedio, poco más de dos Salario Mínimo, Vital y Móvil (SMVyM), según el valor fijado por el gobierno, de $180 mil para febrero.
En el proceso se incluirá, como se detalló, a todos los ingresos por parte de los integrantes del grupo conviviente, tanto como salarios como pensiones, jubilaciones y programas sociales, entre otros. Para detectarlo, se utilizará una cruza de las bases de datos de AFIP y ANSES, entre otros organismos gubernamentales.
«Solo vamos a subsidiar a quiénes los necesiten, los grupos más vulnerables, sin estar promoviendo el derroche. Porque el sistema energético y la economía del país están en una situación crítica«, afirmó Mariela Beljansky, subsecretaria de Planeamiento Energético, quién presidió el evento y remarcó que el objetivo del gobierno es “sincerar y transparentar el costo real de la energía eléctrica y el gas natural”.
“El objetivo es desterrar las prácticas que conducen a una opacidad de la tarifa que no permite conocer los costos reales del servicio público involucrado con la consiguiente afectación de los derechos de los consumidores y usuarios de dichos servicios”, agregó.
Además, durante la jornada se planteó que ninguna «actividad productiva» que utilicen al gas y la luz como «insumo» podrá recibir subsidios. De esta manera, quedarán excluidos de toda asistencia diversos rubros, como los comercios, los sectores industriales y los clubes de barrio, entre otros.
Tener prepaga o comprar dólares: criterios adicionales para perder los subsidios
Complementaria a la CBE, se pusieron ‘sobre la mesa’ nuevos criterios de exclusión a los subsidios, considerados de «presunción de ingresos no declarados» que «podrían tomarse en consideración para el rechazo o exclusión del beneficio».
Estos incluyen tener un plan de medicina prepaga no vinculada a empleo en relación de dependencia, haber realizado más de un viaje al exterior (fuera del Mercosur) en los últimos 5 años, haber adquirido moneda extranjera en al menos uno de los últimos tres meses o tener consumos en tarjeta de crédito superiores a cinco Salarios Mínimos Vitales y Móviles (SMVyM), lo que equivale actualmente a $780.000. En concreto, la lista publicada se compone de:
- Ser titular de una aeronave.
- Ser titular de una embarcación de lujo o con fines recreativos.
- Ser titular de dos o más inmuebles.
- Ser titular de al menos un automóvil con una antigüedad inferior a 5 años o dos automóviles con una antigüedad menor a 10 años.
- Ser titular de al menos un automóvil de lujo o colección independientemente de la antigüedad que registra.
- Ser titularidad de medicina prepaga no vinculada a empleo en relación de dependencia.
- Más de una salida a países no limítrofes en los últimos 5 años.
- Pertenencia al directorio o ser propietario de una empresa privada (IGJ).
- Consumos en tarjeta de crédito superiores a cinco Salarios Mínimos Vitales y Móviles (SMVM), lo que equivale a $780.000 (diciembre de 2023).
- Consumos en billeteras virtuales superiores a cinco Salarios Mínimos Vitales y Móviles (SMVM), lo que equivale a $780.000 (diciembre de 2023).
- Consumos en telefonía móvil superiores al 25% del Salario Mínimo Vital y Móvil (SMVM) lo que equivale a $39.000 (diciembre de 2023).
Desde la Secretaría de Energía se justificó esta decisión al presuponer que los usuarios que cumplen con estas características cuentan con suficientes ingresos o con un patrimonio que le permite afrontar el costo pleno de la tarifa de la energía, sin necesidad de acceder a los subsidios.
Con este esquema, la cartera busca resolver las supuestas «incongruencias que resultan de la acumulación de los esquemas de subsidios vigentes», denunciadas por sus autoridades en las últimas semanas, que «coexisten y se acumulan en una misma factura».
Todo esto implicará en una fuerte reducción en el número de beneficiarios de la asistencia estatal, que se lleva adelante actualmente desde el Registro de Acceso a los Subsidios a la Energía (RASE) con unos 16 millones de usuarios, con criterios de segmentación por ingresos, actualizables por el costo de la Canasta Básica Alimenticia del INDEC, divididos en tres grandes estratos: ingresos altos (que ya sufrieron la pérdida de subsidios a partir de los anuncios de incrementos recientes); medios y bajos.
(Perfil)