El ala de la central obrera más opositora al Gobierno fue la que motorizó un planteo para que los jefes sindicales declaren una nueva medida de fuerza, luego de los dos paros realizados el 24 de enero y el 9 de mayo, en los inicios de la gestión libertaria.
Los ánimos puertas adentro de la CGT subieron de tono luego de la marcha de protesta del miércoles de la semana pasada, que estuvo marcada por violentos enfrentamientos entre la policía y los manifestantes.
(Ambito)