El secretario general del Sindicato de Trabajadores Municipales de Saavedra-Pigüé, Néstor Batista, desmintió que exista un acuerdo cerrado con el Ejecutivo local para una baja de sueldos y responsabilizó al intendente por anunciar una medida unilateral que todavía no fue consensuada.
En declaraciones a Todo Provincial, Batista explicó que el intendente de Saavedra, Matías Nebot, propuso reducir la jornada laboral de los trabajadores municipales de 42 a 35 horas semanales o una rebaja salarial eel 13%. En principio, el gremio se inclinó por la segunda opción aunque planteó una serie de condicionamientos que no fueron cumplidos, por lo que el acuerdo nunca fue firmado pero el intendente anunció la rebaja públicamente.
“El intendente se apuró a anunciar algo que no estaba cerrado. Nosotros dijimos que lo firmábamos, pero con condiciones: que los médicos trabajen más horas, que quienes no cumplan funciones sufran descuentos, que se ordenen áreas como limpieza y salud. Nada de eso sucedió”, aclaró el dirigente sindical.
Según detalló Batista, el municipio acumula un déficit estructural que ronda los 200 millones de pesos mensuales, además de una deuda con proveedores de 1100 millones y un descubierto bancario cercano a los 390 millones. Aun si los trabajadores aceptaran la baja salarial —que representaría un ahorro estimado de 170 millones de pesos— el rojo municipal seguiría sin resolverse.
“Hace años que advertimos que el municipio se estaba desfinanciando”
Batista aseguró que la situación actual no es nueva y que el sindicato viene alertando desde hace seis años sobre la pérdida de sustentabilidad de la comuna. Atribuyó el problema a una política sistemática de subestimación de tasas municipales, impulsada por la clase política local.
“El municipio brinda muchos servicios gratuitos que en otros distritos se cobran. La recolección de residuos es diaria, se levanta voluminoso sin cargo y se subsidian clubes, instituciones y fiestas barriales con recursos públicos”, remarcó el sindicalista. También cuestionó que no se cobre atención en el hospital durante los fines de semana ni en los cementerios de las delegaciones.
Respecto a su postura, Batista fue tajante: “Aunque nos bajemos el sueldo, igual no alcanza. Entonces, ¿para qué firmar algo que no resuelve el problema de fondo?”
Un gremio con historia de control y austeridad
El secretario gremial subrayó que los trabajadores municipales de Saavedra trabajan más horas que en otros distritos (42 semanales) y que el salario básico ronda los 970 mil pesos.
Además, reivindicó el rol del sindicato en el control del gasto público: “Nosotros controlamos el ejecutivo, exigimos los recibos de sueldo de los funcionarios, revisamos las rentas y evitamos contrataciones políticas innecesarias”. Incluso reveló que, a comienzos de año, los trabajadores estuvieron más de un mes de paro por la incorporación de cargos ligados a la campaña electoral.
A pesar del conflicto, Batista adelantó que el gremio no impulsará un paro por tiempo indeterminado si el intendente reduce unilateralmente la jornada laboral. “Ya tuvimos conciliación obligatoria, y aunque podríamos parar, hoy seguimos trabajando. Pensamos en el pueblo, a pesar de que recibimos cachetazos de todos lados”, expresó.
Para cerrar, el dirigente cuestionó la falta de respaldo social y político: “Nadie se hace cargo: ni la Cámara de Comercio, ni las sociedades rurales, ni los bloques políticos. Nos bajamos el 17% del sueldo y todavía nos faltan 200 millones por mes. ¿Hasta cuándo vamos a pagar solos?”
(Todo Provincial)
