La empresa concesionaria junto a la administración del Parque Nacional Iguazú determinó cerrar “de forma preventiva” el circuito Garganta del Diablo debido a la crecida extraordinaria del río Iguazú.
Las represas ubicadas aguas arriba de las Cataratas emitieron un alerta dando a conocer que debido a la crecida del río deben abrir compuertas; esto provocará que el caudal de agua aumente de gran forma.
El intendente del Parque Nacional Iguazú, Atilio Guzmán, informó que “el circuito de la Garganta del Diablo se cerrará al público debido a que actualmente se superan los 9 mil metros cúbicos por segundo, y el agua está muy cerca del nivel de las pasarelas. En forma habitual dicho caudal no debería superar los 1.600 metros cúbicos por segundo. Este se debe a la crecida del río Iguazú”, detalló.
También comentó que “esta gran cantidad de agua se debe fundamentalmente a una condición climática, está lloviendo mucho en la cuenca alta del río Iguazú. Recordemos que el río Iguazú va hasta la localidad de Curitiba, en Brasil, muy cerca de la costa del océano Atlántico, y también sumado a la acción conjunta de varias represas sobre este cauce hacen aún peor esta crecida“.
Por otra parte, Guzmán aclaró a FM 89.3 Santa María de las Misiones que este viernes solamente la “Garganta del Diablo” estará cerrada. Los demás circuitos seguirán abiertos al público. En cuanto a los paseos náuticos seguirán abiertos, excepto el paseo ecológico que sale de Garganta del Diablo hasta Puerto Tres Marías”.
Un antecedente del cierre de la Garganta del Diablo se remonta al 3 de diciembre del 2015 cuando el caudal del río alcanzó los 11 mil metros cúbicos por segundo, un aumento importante, teniendo en cuenta que el habitual es de 1.500 metros cúbicos.
Según se precisó en aquel momento, la creciente comenzó a evidenciarse a raíz de las lluvias incesantes que se registraron en el sur del Brasil, principalmente en los estados de Paraná, Santa Catalina y Río Grande del Sur.