
El cantante español Joaquín Sabina lanzará un nuevo disco en diciembre y realizará una gira desde febrero por América, que incluirá Argentina, anunció el artista este sábado en el Festival de Cine de San Sebastián con motivo del estreno de «Sintiéndolo mucho», un documental centrado en él dirigido por Fernando León de Aranoa.
«Yo no voy de gira si no tengo canciones nuevas», reveló Sabina a la prensa en la presentación de la película, tras un período de alejamiento de los escenarios por una caída que sufrió en un concierto en Madrid en 2020.
Luego el éxito de «Lo niego todo» (2017), su primer disco con Leiva como productor, el músico de 73 años, decidió volver a asociarse con su compatriota multiinstrumentista para este trabajo, a estrenarse en el mes de diciembre.
En cuanto a la gira, contó que se iniciará a finales de febrero en América Latina, que incluirá Argentina y que luego visitará España, y otra vez América: «Estamos firmando conciertos«, señaló.

El documental, que aún no tiene fecha de estreno, recoge momentos compartidos entre el cineasta y el cantante a lo largo de trece años, desde el último concierto en Madrid con Serrat, a reuniones de amigos en su piso madrileño, una gira por México o un homenaje recibido en Úbeda, su ciudad natal. «He triunfado en el microsurco y ahora quiero triunfar en el celuloide», dijo Sabina.
«Sintiéndolo mucho», o en la intimidad con Joaquín Sabina
Joaquín Sabina, aterrado antes de salir al escenario, llorando en una plaza de toros por el diestro corneado o haciendo balance de su vida en su casa. Momentos íntimos retratados en «Sintiéndolo mucho», un documental presentado este sábado en el Festival de San Sebastián.
Es una obra del director español Fernando León de Aranoa, amigo cercano de Sabina, quien tuvo un acceso privilegiado al cantante, poeta y pintor durante trece años.
«Lo primero que hice fue decirle (a León de Aranoa) que no necesitaba llave para entrar a ningún sitio. Resumiendo en mal español: que me pillara cagando. Y eso lo ha hecho así», expresó entre risas Sabina en una rueda de prensa en la ciudad del norte de España.
Así que «no es un documental a mayor gloria de un artista, sino que es un trozo de vida de un cantante», continuó el artista de 73 años.
«Mi mujer, que no es nada dada a echar piropos, (…) lo primero que me dijo fue que Fernando me había sacado del alma» en la película, relató Sabina con su característica voz rasgada.
– «Situaciones vivas» –
León de Aranoa intercala imágenes del cantante en diversas facetas de su vida con trozos de conversaciones en el salón de su casa en Madrid, en las horas previas a un concierto o en el camino hacia una cena con mariachis en Ciudad de México, para dibujar un perfil en profundidad del artista.
«No un documental especialmente testimonial, con gente opinando sobre su música o sobre su trabajo, sino situaciones vivas», contó el director.
La película, proyectada en una presentación especial durante el festival donostiarra, está llena de momentos reveladores, como cuando Sabina debe ir al baño a vomitar por los nervios que tiene antes de salir al escenario.
«Parece mentira que con 40 años de profesión me pase esto», confiesa en ese instante.
«Era sexo, drogas y rock. Duró hasta los 50 años. No está mal, ¿eh?», dice en otra ocasión Sabina, quien sigue en activo aunque con una vida más sana.
La idea del documental fue del propio Sabina, quien invitó por primera vez a León de Aranoa a seguirlo con una cámara hace trece años, cuando se dirigía al sur de España a componer canciones para un nuevo disco.
Desde la parte trasera de un automóvil, se puede ver a Sabina de copiloto discutiendo la letra de la canción «Cristales de Bohemia» con el poeta Benjamín Prado, con quien debate sobre palabras para hacerla más sonora.
– Golpes de la vida –
León de Aranoa es testigo en primera fila de sucesos que han marcado la vida del cantante, como cuando estaba en 2010 en la plaza de toros de Aguascalientes, México, viendo lidiar a su amigo José Tomás, y el diestro recibió una cornada que casi acaba con su vida.
Impactado, Sabina no puede evitar las lágrimas. Apenas horas más tarde, cuando el torero era operado y no estaba todavía fuera de peligro, el cantante debe montarse en un escenario para dar un concierto frente a miles de personas.
También está su espectacular caída del escenario cuando daba un concierto junto a Joan Manuel Serrat en Madrid en 2020, que le produjo un derrame cerebral.
Pero el documental incluye por igual muchos momentos alegres, como cuando Sabina visita su ciudad natal, Úbeda (sur de España), para recibir un reconocimiento.
«Es un placer trabajar con amigos y eso creo que es una de las cosas buenas que tiene el documental, que se ve esa alegría de estar con gente querida», resumió Sabina en la rueda de prensa.
