
Mejorar el abordaje de los casos de violencia de género mediante una evaluación más precisa de la situación de cada víctima, es el eje de la reciente apertura de la carga de datos sobre mujeres que padecen este flagelo, en un registro único creado por ley en 2014.
Con la nueva metodología de trabajo, a partir de ahora los operadores del sistema dispondrán de información acerca de la historicidad de la persona damnificada, que les permitirá “pensar” en el diseño de políticas públicas para combatir esta problemática en Adolfo Alsina y la zona.
La iniciativa tiene como objetivo además optimizar el tratamiento de este tipo de hechos por medio de la contención y asesoramiento a mujeres afectadas, así como prevenir nuevos episodios.
La incorporación de los datos a un sistema informático derivará asimismo en la posibilidad de elaborar proyectos para alejar a mujeres de contextos violentos, y generar -en los casos que sea necesario- alternativas de reinserción en el mercado laboral.
“Es una herramienta que aporta muchos datos y que hasta hoy no teníamos. Es algo que está pensado desde 2014, pero no se había puesto en funcionamiento, más allá de que los municipios que vienen trabajando en esta temática desde hace más tiempo ya habían recibido varias capacitaciones”, explicó Silvia Zaballa, directora de la región sexta del ministerio de Mujeres, Políticas de Género y Diversidad Sexual bonaerense.
“Apunta a la prevención porque no se puede evaluar el riesgo si no sabés lo que pasó antes. Cuando contás con datos previos, podés hacer una evaluación de riesgo mucho más real”, agregó.
“En este registro van a estar cargados no sólo los datos de cualquier mujer que atraviesa una situación de violencia de género, sino también la información del caso. Esto nos permite tener una historicidad de la mujer víctima y de su agresor, porque así podemos evaluar si es el primer hecho de violencia contra esa mujer o si hubo otros”, completó la funcionaria.
En el marco de una capacitación desarrollada días atrás en Sierra de la Ventana, los encargados del procedimiento en los 22 distritos de la Sexta Sección recibieron una clave alfanumérica para acceder al programa informático e iniciar la carga de datos.

El proceso está a cargo de las áreas de Género municipales, los equipos de violencia de Región Sanitaria I y los que evalúan las licencias de violencia por razones de género en cada organismo provincial, el Poder Judicial y el ministerio de Seguridad, entre otros órganos.
“Varios organismos van a realizar la carga, de modo tal que cuando se ingrese el número de DNI de una mujer que padece este tipo de violencia, se podrá confirmar si esa víctima ya está cargada, quién la cargó y ponerse en contacto con quien haya hecho la carga para analizar el caso”, precisó la trabajadora social.
“Los datos cargados en el formulario de denuncia único, que nos permite no revictimizar, también se van a incluir en este registro provincial, que además aporta al registro nacional”, acotó.
Más info a las comunas
El nuevo recurso desembocará en la obtención de datos “más concretos” sobre las víctimas, que también estarán disponibles para cada municipio con el fin de trabajar en “política pública”.
“Porque si en general los casos se producen en un determinado barrio, habrá que hacer allí una actividad de prevención. O, si la violencia de género que se ejerce en nuestra comuna se relaciona con determinada modalidad, tendremos que trabajar sobre eso”, dijo Zaballa.
“Se podrá discriminar por barrio porque hay direcciones y, dentro de cada municipio, vas a poder ver por localidad. Desde ese sistema podés exportar un Excel que te va a permitir analizar información con gráficos de forma práctica.
El mecanismo fomentará además la no revictimización y el acompañamiento a la mujer afectada.
“De esta manera también sabremos si se incluyó a la víctima en un programa provincial o nacional, y si tiene hijas y/o hijos. Tener datos es lo que las mujeres y diversidades de nuestro país, desde los feminismos, reclamamos cada 3 de junio”, resaltó la entrevistada.
“La carga de datos se puso en funcionamiento lentamente porque es todo un aprendizaje y siempre tiene sus dificultades. El registro es dinámico porque desde que los primeros municipios lo estrenaron, ya cambió y seguramente va a seguir cambiando porque dentro de la ley se van incorporando nuevas formas de violencia”.
“Y, por otro lado, determinamos qué nuevos datos son necesarios cargar”, completó la licenciada en Gestión Educativa, con domicilio en la localidad serrana mencionada.
La dirección de estadística y registro único de casos de violencia de género, y la subsecretaría de políticas contra las violencias por razones de género coordinan el registro.
“Es decir que hay una dirección de línea pensada específicamente para esta iniciativa por la complejidad de la problemática”, opinó la fuente.

La clave de la denuncia
La representante ministerial destacó la importancia de que la víctima denuncie rápidamente, para que las autoridades puedan cargar la información del caso en el registro único por medio de su número de documento.
“A veces no disponemos de ese dato porque no hay una denuncia formal en la Justicia; por el contrario, sólo tenemos el nombre de la persona perjudicada y simplemente un relato dentro del área de Género”, expresó la oriunda de Coronel Suárez.
“En este tipo de hechos, la mujer no hace la denuncia inmediatamente después de que decide empezar a transitar el camino de desandar la violencia que está viviendo. A veces se presenta en el área de Género, hace la consulta y relata la situación que atraviesa, pero no radica denuncia”.
Una de las primeras medidas en la que trabajó la subsecretaría de Políticas contra las violencias por razones de género, después de crearse el ministerio en diciembre de 2019, fue la activación del registro único que finalmente se concretó este año.
“El registro único de casos de violencia de género es una ley de 2014, pero es una política pública que todavía no se había puesto en marcha. Que nuestro área tenga rango ministerial posibilitó acuerdos con otros espacios que también van a realizar la carga de datos.
“Además nacieron espacios de Género en todos los ministerios, en los que también están los equipos que reciben las licencias de violencia por razones de género. Cuando empezamos, en la región había 3 espacios de género y en la actualidad hay 22, o sea que se produjo un cambio sustancial en este trabajo”, manifestó Zaballa. (Diario de Rivera/Con Info de La Nueva)
