Luego del paso del agua de deshielo, se forma una especie de puente de más de 70 metros de altura y 250 de largo, que luego termina desmoronándose en el concurrido espectáculo que se escucha a varios kilómetros del lugar en medio del bosque patagónico.
El glaciar y el calentamiento global
Pese a que este desprendimiento forma parte de una condición natural, los aumentos de las temperaturas producto del calentamiento global preocupan a los especialistas.
El glaciar es el único de la Patagonia argentina que aún posee un equilibrio en el balance de su masa, es decir, que el nivel de hielo no retrocede más de lo que avanza. Sin embargo, esta situación podría estar en riesgo, debido a que en los últimos dos años retrocedió más de 700 metros.
En caso de confirmarse, científicos del Instituto Argentino de Nivología, Glaciología y Ciencias Ambientales (Ianigla) junto al expertos del Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas (Conicet), buscan conocer si este proceso es irreversible.
(Ambito)