Aunque cada historia es diferente, la mayoría de las emprendedores relacionados al turismo rural coincide en que abrirse a recibir a quienes visitan la región ha sido la solución para tener una fuente de inspiración para revitalizar los pueblos.
La historia de nuestros pueblos también es la historia de muchas mujeres que con valentía y esfuerzo han apostado por el complicado mundo del emprendimiento rural para contribuir con su trabajo a levantar importantes lugares históricos que forman parte de la herencia de la inmigración, como Colonia Lapin. De allí es Betina Soquiransky, parte de una familia tradicional del lugar, quien se sumó como prestadora de servicios del “Triangulo Turístico Rural”.
«Decidí unirme a este proyecto con la idea de poder compartir con la gente que nos visita mi profundo amor por mis raíces y, en particular, dar a conocer la historia y la vida de nuestra querida Colonia Lapin, una comunidad que tiene un rico legado que ha perdurado a lo largo del tiempo, y al que considero que es un tesoro que merece ser compartido con el mundo», nos cuenta Betina.
«El corazón de esta experiencia es un recorrido que muestra toda la cadena de producción de nuestra colonia. Comenzamos en los tambos, donde los turistas pueden presenciar el ordeñe de las vacas y la crianza de sus crías. Cada paso en este proceso productivo contribuye a la obtención de una leche de alta calidad, y explicar estos procesos es esencial para comprender el valor de nuestro trabajo», expresa.
«Continuamos nuestro viaje en las instalaciones de la Fábrica de «Lácteos de la Colonia», donde detallamos las diversas etapas que lleva a cabo la elaboración de las distintas variedades de nuestros quesos artesanales. Esto incluye información sobre los tiempos de estacionamiento y las características únicas de cada producto».
Es importante destacar que «Lácteos de la Colonia» es una empresa tradicional de Adolfo Alsina con mano de obra familiar. «Más de 30 familias de diferentes lugares se unen en este esfuerzo que le da vida a nuestra querida Colonia Lapin. Agradezco a todo nuestro equipo de trabajo por ser parte fundamental de esta cadena productiva», pone en relieve Soquiransky.
Como broche de oro al recorrido, ofrecen una degustación que incluye una tabla de quesos, acompañada de la línea de vinos de autor de la bodega de Eduardo Vidal, «otro emprendimiento que forma parte de nuestra familia», dice Betti. «Para el postre, compartimos el clásico «VIGILANTE» (queso y dulce), una delicia que representa la esencia de nuestra gastronomía regional».
«Nuestra intención es seguir ampliando este circuito para que más personas puedan conocer la historia, la cultura y las costumbres de Colonia Lapin. Cada paso en este viaje representa un eslabón en la cadena que une nuestro pasado con el presente, y tengo la esperanza de que esta experiencia continúe enriqueciendo la vida de quienes nos visitan», cierra Betina.
El Triangulo Turistico Rural es una aventura apasionante, y mujeres como Bettina le dan voz a esos pueblos de Adolfo Alsina para conocer sus historias y conocer los avances y éxitos de este proyecto que celebra el legado de nuestra tierra.
Para contarse con Betina Soquiransky por whatsapp 2923 64-7189
Instagram Lácteos de La Colonia
Instagram Triangulo Turístico Rural