El 1 de septiembre de 2022 el país se convulsionó por un intento de asesinato de la entonces vicepresidente y dos veces expresidenta Cristina Kirchner, mientras saludaba a un grupo de seguidores frente a su domicilio en el barrio de Recoleta.
La denominada Banda de los Copitos, con Fernando Sabag Montiel y Brenda Uliarte al frente, fueron inmediatamente detenidos como responsables del ataque.
La semana pasada comenzó el juicio y hoy era el turno de declarar de Uliarte, aunque luego de responder las primeras preguntas se arrepintió.
«No más preguntas», pidió la joven de 25 años, quien aseguró que no se encontraba en condiciones de continuar.
La audiencia comenzó pasadas las 10 de la mañana. Uliarte contestó sobre sus datos personales, estado civil y su trabajo, y la primera requisitoria de su abogado defensor sobre su rol en el caso. “Participe y encubridora, pero no soy…”, se interrumpió. Se agarró la cabeza y ya no siguió.
Antes había dicho que trabajaba en un kiosco y vendiendo copitos. Cuando la fiscal le consultó si también ofrecía material erótico, explicó que sí, pero que fue “algo pasado”.
Tras el abrupto final de su indagatoria, se dio paso a la declaración del acusado como partícipe secundario Nicolás Carrizo, quien había solicitado realizar una exposición pero sin responder preguntas.
La semana pasada, Sabag Montiel, el hombre que gatilló el arma, sostuvo que Uliarte fue “más una espectadora del momento que una partícipe” y que Carrizo se “autoincriminó injustificadamente”.
Argumentó: “Es un acto de justicia, no fue para beneficiarme económicamente. Tiene una connotación más profunda, más ética y más comprometida con el bien social que otra cosa“. Luego apuntó al Poder Judicial: “Soy el resultado o el factor de muchas fallas de la justicia”, dijo, para agregar: “Una parte de la justicia argentina no funciona”.
El juicio se realizará con audiencias una vez por semana (todos los miércoles) en la Sala AMIA, en el subsuelo de Comodoro Py 2002. A Sabag y Uliarte les correspondería una pena que va de los 13 años y 4 meses de prisión a los 20 años. A Carrizo, desde los 6 años y 8 meses hasta los 14 años y 8 meses.
Para este juicio fueron aceptados, en total, 277 testigos y se estima que todo el proceso puede demorar un año.