Durante las últimas horas, a través de una medida sin aviso previo, el Gobierno Nacional cerró la plataforma Cont.ar, el streaming que exhibía programas, series, documentales y obras nacionales. “Página web en reconstrucción” es la leyenda que aparece cuando se quiere ingresar a la página o a la app.
Desde el Gobierno libertario no hay un anuncio oficial del cierre o de la reconstrucción del sitio pero, según informó Página 12, diferentes fuentes de la intervención de los medios públicos expresaron que “no se trata de una medida momentánea y que no hay en marcha reconstrucción alguna”, ya que el cierre es “definitivo”.
A su vez, también expresaron los motivos del aparente cierre: hacer más productivos y rentables los recursos públicos por un lado, y por otro, centralizar todo el material audiovisual con el fin de comercializarlo.
Otra clausura del Gobierno: el cierre de Cont.ar
La plataforma de streaming Cont.ar era una arteria fundamental para la difusión y visibilidad de producción nacional. Además, al ser gratuita, era una opción ante los servicios audiovisuales pagos como Netflix, Max, Disney Plus, etc.
Con más de un millón y medio de usuarios registrados a fines del 2023, este servicio presentaba un catálogo de más de 5.200 horas disponibles de acceso, con casi 2.000 títulos de distintos géneros y temáticas. Además, Cont.ar era un sitio web con importante tráfico: 56 mil reproducciones semanales en promedio, alcanzando casi las 3 millones de visualizaciones al año.
Hace algunos días, desde la Comisión Interna de Contenidos Públicos S.E. “repudiaron y rechazaron la baja de la plataforma Cont.ar bajo la excusa de reestructuración”. Esto “significa un nuevo ataque a la libertad de expresión y un avasallamiento de las instituciones por parte del actual gobierno que atenta además contra el trabajo de nuestros compañeros y compañeras”.
Cabe destacar que la clausura de Cont.ar se suma al cierre de redes sociales y sitios web de “los canales Encuentro y Pakapaka desde hace más de un mes”, cuyo “efecto inmediato” es “restringir el acceso de las audiencias a los contenidos que las señales generan”.
(Infocielo)