
Boca Juniors se consagró campeón del Trofeo de Campeones del Torneo Proyección tras vencer 2-0 a Vélez Sarsfield en el Estadio Florencio Sola, coronando un año brillante en el que también había obtenido el Clausura.
El partido comenzó con dominio de Vélez, que generó varias situaciones claras y hasta convirtió un gol que fue anulado por offside. Con el correr de los minutos, Boca ajustó su funcionamiento y empezó a llegar con peligro, sostenido por intervenciones claves de Brey y por la profundidad de Gorosito.
En un duelo parejo y exigente, el Xeneize golpeó en el momento justo: en la última jugada del primer tiempo, Iker Zufiaurre apareció en el primer palo tras un córner y marcó el 1-0 que cambió la historia. En el complemento, Vélez volvió a presionar y tuvo chances para empatar, pero Brey respondió con seguridad y la defensa Xeneize volvió a imponerse.
Con los cambios, el equipo de Herrón recuperó el control del mediocampo y volvió a generar peligro. En el cierre, a los 43 minutos, Aranda habilitó a Lautaro Bianco, quien definió con tranquilidad para sellar el 2-0 definitivo.
Boca dominó los minutos finales y aseguró un título que premia su consistencia y contundencia en los momentos clave. El recorrido del Xeneize hasta este nuevo logro incluyó victorias en playoffs frente a Lanús, Instituto y un recordado 2-0 ante River con doblete de Zufiaurre, además de una final vibrante ante Gimnasia que resolvió por penales.
Con este triunfo ante Vélez, Boca culminó un semestre ideal y reafirmó su protagonismo en el fútbol de proyección argentino.
Con información de ESPN

















