«Las medidas urgentes –anunciadas ayer por el ministro de Economía, Luis Caputo– eran necesarias e inevitables para lo que viene en las próximas semanas, que es el plan de reformas estructurales. Indefectiblemente, este paquete era necesario para evitar una catástrofe. El escenario hiperinflacionario que analizamos es mucho más gravoso que el de 1898-90, cuando la inflación superó el 3.000 % anual».
Así comenzó su conferencia diaria el vocero presidencial Manuel Adorni, un día después de los primeros anuncios importantes del gobierno de Javier Milei.
«Nuestro norte más urgente es el déficit cero. No se puede gastar más de lo que ingresa y eso no es negociable», manifestó.
Acerca de los subsidios a la energía y el transporte, Adorni dijo que se tratará de una reducción progresiva y no de una quita total inmediata. Añadió que el efecto se verá desde el 1 de enero, aunque no dio mayores explicaciones respecto de las formas de implementación. Sí habló de «la inequidad en favor del AMBA respecto del interior del país» y deslizó que la idea es mantener ayudas a la demanda y no a la oferta..
Agregó: «A este gobierno no le han dejado un paciente con un dolor de muelas sino un paciente en terapia intensiva a punto de morirse. Y no vamos a dejar que se muera porque eso significaría niveles de pobreza nunca vistos en Argentina».
También sostuvo que «no hay que tener miedo a la verdad, nosotros no vamos a mentir ahora ni más adelante. No son las medidas que soñamos, pero les recuerdo que hace solo 72 horas que el presidente de la Argentina es Javier Milei. Decir la verdad es importante porque, si no nos creen, nada de este será posible. Nos importa decir la verdad, incluso si las cosas no salen como esperábamos».
Luego expresó que «El Banco Central ya no es nuestro amigo, no va a financiar al tesoro» con emisión de moneda. Y reiteró que se van a eliminar las transferencias a las provincias.
En el momento de las preguntas, también se le consultó sobre la movilidad jubilatoria. «Nuestra idea es terminar con un esquema que ha dejado a muchas personas en un lugar de muy bajo nivel. Los jubilados iban a seguir perdiendo y queremos cortar este esquema perverso». Si bien no habló directamente de aumentos discrecionales dispuestos por el gobierno, fue la idea que quedó flotando.