Continúa vigente el alerta Roja por altas temperaturas emitida ayer por la tarde por el Servicio Meteorológico Nacional (SMN).
La advertencia incluye a localidades de Adolfo Alsina, Salliqueló, Guaminí, Daireaux, Tres Lomas y Trenque Lauquen
Además, pero en alerta amarilla, están los distritos de Bahía Blanca, Puan, Pigüé, Coronel Suárez, Coronel Pringles y Tornquist, entre otras localidades. Abarca a casi la totalidad de la provincia de Buenos Aires.
Los efectos de estas altas temperaturas podrían ser de intensidad alto a extremo en la salud, representan un riesgo particular para los grupos vulnerables, como niños, niñas, personas mayores de 65 años y quienes padecen enfermedades crónicas, pero pueden afectar a todas las personas, incluso a las saludables.
En localidades de Adolfo Alsina, la temperatura máxima podría trepar hasta los 39 grados este miércoles, mientras que se espera un leve descenso a partir del jueves, pero con temperaturas siempre por encima de los 28 grados.
Recomendaciones
Un golpe de calor puede ser grave y requerir atención inmediata. Entre los síntomas que pueden presentarse se encuentran fiebre superior a 39 °C, mareos, náuseas o piel seca.
En caso de detectarlos, se recomienda trasladar a la persona afectada a un lugar fresco y ventilado, retirarle la ropa ajustada y aplicar compresas frías. Si está consciente, es importante hidratarla con agua segura, mientras que, en caso de pérdida de conciencia, se debe contactar de inmediato al sistema de emergencias.
La prevención resulta clave para evitar complicaciones. Mantener una hidratación adecuada es fundamental: es recomendable beber agua con regularidad, incluso en ausencia de sedantes, mientras que los bebés en etapa de lactancia deben recibir tomas más frecuentes. También es importante proteger la piel y evitar la exposición solar directa, especialmente entre las 10 y las 16. Permanecer en ambientes frescos, ya sean ventilados o climatizados, y consumir al menos dos litros de agua por día contribuirá a mitigar los efectos del calor. Asimismo, se aconseja vestir ropa liviana, de algodón y colores claros.
Los grupos de riesgo requieren cuidados especiales. En el caso de los niños y niñas, es esencial asegurar que beban agua regularmente, evitar el consumo de bebidas azucaradas y proteger su piel con gorros y protector solar.
Para los bebés, mantener su piel seca ayuda a prevenir irritaciones por sudor y, a partir de los seis meses, se les debe ofrecer agua potable.
Por su parte, los adultos mayores deben limitar sus salidas al exterior sin acompañamiento y permanecer en espacios frescos y bien ventilados.
Ante estas condiciones, la adopción de hábitos preventivos resulta esencial para preservar la salud y evitar complicaciones asociadas con las altas temperaturas. (Diario de Rivera)