«Si Milei no quiere cumplir con el federalismo, se lo vamos a hacer cumplir», dijo este viernes el gobernador bonaerense Axel Kicillof, desafiante, durante una rueda de prensa en Casa de Gobierno, junto al pampeano Sergio Ziliotto.
Ambos firmaron convenios de colaboración en el Salón de Acuerdos, en lo formal. Pero fundamentalmente ratificaron una alianza política ante el ajuste y el avance sobre los recursos provinciales del gobierno de Javier Milei.
«El mercado no resuelve todo. Hay derechos que deben reconocerse a los ciudadanos de las provincias más allá de si lo pueden comprar o no. Venimos a defender un estado presente», sostuvo el gobernador bonaerense en el encuentro.
«Es calamitoso lo que está ocurriendo hoy con la economía argentina», dijo el mandatario de la provincia vecina. «Hay un estado desertor de sus obligaciones», fustigó con dureza a la gestión del presidente Javier Milei.
Kicillof y Ziliotto coincidieron en el diagnóstico y en la propuesta política para resistir el embate anarcolibertario. Fustigaron la sanción de la Ley Bases y las facultades delegadas que permitirán profundizar el ajuste.
Los acuerdos firmados están anclados en colaboración en cinco ejes: obras, salud, educación, seguridad y asistencia social. A eso hay que sumarle acuerdos que podrían firmar los bancos de ambas provincias.
Luego de la firma, brindaron una conferencia de prensa, en la que recordaron que compartieron funciones en el Congreso cuando fueron diputados nacionales. Los dos gobernadores se tiraron flores durante la actividad.
«Seguimos con las mismas convicciones, por las que luchamos siempre», dijo el gobernador pampeano, ante lo que inscribió como «la avanzada de la derecha». «La defensa de los que menos tienen y del federalismo es algo que siempre reclamaremos», advirtió.
El gobernador aludió a las «circunstancias difíciles» del país. «Estamos ante un nuevo país. Nos enfrenta desde el punto de vista de la ideología. Hay distintas formas de crecer, la diferencia es si es con inclusión y a quién beneficia. Nosotros vamos a seguir en el mismo camino y con las mismas herramientas. Tenemos en claro qué defendemos. Ratificamos el federalismo», señaló.
Zilioto dijo que Milei tomó como «enemigo» al federalismo y «está cumpliendo la amenaza de fundir a las provincias». «La Argentina es un poco más injusta y cada vez menos federal. Sinceramente, el paquete fiscal le quita recursos permanentes a las provincias, a los municipios y a su gente. Lo dijimos y no pudimos frenarlos. Pero no vamos a abandonar nuestras convicciones y esto que hacemos hoy es una respuesta, el estado es la última trinchera en defensa de lo que menos tienen. Aunque nos quiten recursos, trabajamos en articular para ser más eficientes».
«Esto no es una medida política partidaria, es defender La Pampa, y el mandato popular. Hacer valer la representatividad popular que nos dieron. Acá no hay voto calificado, los votos que tenemos los gobernadores también valen. Somos consecuentes con lo que llevamos como propuesta electoral el año pasado», aclaró. «Este modelo político no tiene posibilidad de tener éxito e integrar a todos. Quisiéramos ser optimistas, pero si a este gobierno le va bien no le va bien a la gente, es un país que excluye, concentra la riqueza y extiende la pobreza y la indigencia», insistió.
Por su parte, el gobernador de Buenos Aires, Axel Kicillof, en primer lugar, destacó los convenios firmados. «Somos dos provincias vecinas, compartimos una extensa frontera común, con varios municipios del oeste de la provincia de Buenos Aires que están en esa franja. Hay cercanía, el contacto no respeta la frontera», indicó. Señaló que la «interacción» obliga a los gobiernos de ambas provincias a coordinar y articular recursos, por ejemplo, en el sistema de salud y el de seguridad. «Vamos a darle un marco de institucionalidad para tener más resultados y eficacia», dijo.
En segundo término, el gobernador bonaerense suscribió con firmeza el mensaje político de Ziliotto y se explayó sobre la coyuntura política. En ese sentido, defendió la idea de «un estado presente» que contradice la propuesta de Milei de dejar todo en manos del «mercado».
«No hay libertad real, genuina, efectiva, sin que haya igualdad de oportunidades y sin que haya justicia social», declaró Kicillof. «Estamos en una etapa muy compleja, muy complicada. Ya estamos viendo cuáles son los efectos de esta política económica. Nos habían dicho a todos los argentinos y argentinas que esta era una novedad, que venía de unas escuelas que muchos no sabían ni que existían. El pensamiento es que era una especie de panacea, una poción mágica que iba a solucionar los problemas que había. Y la verdad es que lo que hoy observamos es que el Producto Bruto Interno tuvo una de las caídas más grandes de los últimos tiempos, 5,5 trimestre contra trimestre», citó.
Sobre los resultados económicos de la gestión Mieli, dijo que «lo que se observa es un salto inmenso de deterioro. O sea, es calamitoso lo que está ocurriendo hoy con la economía argentina y en cada una de nuestras provincias. Tiene cada vez más efectos».
«Lo que estamos observando, a veces he dicho con frases, como que va a a fundir a las provincias, es un desprecio por el federalismo argentino, pero eso agravado porque quiere destruir el Estado desde adentro. Este tipo de frases, que tal vez he dicho en televisión, repetidas en las redes sociales, parecen cuestiones anecdóticas o tal vez. Pero lo triste es que está ocurriendo», acotó.
«Hoy el Estado Nacional está mayormente ausente. Nosotros lo llamamos, no ausente, un Estado desertor. Desertaron de obligaciones que tienen, que no son optativas, más allá del posicionamiento ideológico del presidente que hoy ocupa ese lugar», resaltó.
«Para las provincias que no haya Estado Nacional en muchas áreas que tienen que ver con cuestiones claves del bienestar de nuestras poblaciones, es algo de extrema gravedad», lamentó.
Ante ese panorama, aclaró que Buenos Aires, a pesar de su peso demográfico, «no se salva sola, no quiere salvarse sola». «Conforma un país que tiene un régimen que es federal. Y esto tampoco es optativo. Está en la Constitución Nacional», alertó.
«El presidente puede estar en contra del federalismo o pensar que el Gobierno Nacional no tiene ni territorio ni población, entonces que se ocupan de otra cosa. Pero no es verdad. Y cuando nosotros juramos sobre la Constitución Nacional, contiene el federalismo», insistió.
El gobernador calificó de «aberrante» la Ley Bases que permitirá a capitales extranjeros llevarse recursos a cambio de nada.
«Ante esta situación, lo que a nosotros nos queda es seguir trabajando en conjunto. Obviamente que no nos vamos a resignar. Obviamente que no vamos a cambiar nuestras convicciones. Es más, las vamos a profundizar con un trabajo en conjunto entre las provincias. Porque nuestra obligación es cumplir la constitución provincial. Así que le digo al gobierno nacional y al presidente, que la constitución nacional y el federalismo argentino no es optativo. Lo tiene que cumplir. Y si no lo quiere cumplir, se lo vamos a hacer cumplir», enfatizó.
Consultado sobre la salida a la coyuntura política del peronismo, respondió: «Cada gobernador tiene una responsabilidad enorme, cada vez más compleja en esta realidad, sostener el funcionamiento de los gobiernos provinciales, pagar los sueldos, cumplir con nuestras obligaciones. Eso es mucho en este momento por dos factores, uno porque la crisis económica empieza a hacer estragos en las finanzas provinciales también. Sergio lo está haciendo muy bien, y mostró que el aumento en la recaudación del impuesto de la ganancia con el tiempo se va compensando con la caída de bienes personales, así que lo que se ha hecho es dañar todavía más al federalismo argentino el día de ayer en materia tributaria».
«Estamos obligados a dar respuesta cada uno en la responsabilidad que tenemos y después seguir trabajando intensamente para buscar la unidad y también buscar la aptitud, estas dos cosas a la vez. Y creo que en este trabajo, Sergio, por el papel que ocupa, pero además por su trayectoria, por su convicción y por su coherencia, es un referente importantísimo a nivel nacional», subrayó.
Finamente, el gobernador bonaerense apeló a la ironía cuando le preguntaron por el eventual premio Nobel para Milei. «La veo difícil, no venimos bien», dijo. Y añadió: «Nunca escuché que lo mencionaran en ámbitos académicos y participa de una escuela muy marginal. Ahora tiene una responsabilidad que no es escribir artículos, su obligación como presidente es mejorar el bienestar, el empleo, la producción. Todos los indicadores le dan mal. Estamos en un país con más desocupación, con menos producción, con menos consumo, con menos salario, con menos jubilaciones y con más desigualdad o más injusticia desde que llegó. Esos son los resultados», completó.